lunes, 28 de septiembre de 2009

Tres versiones de Judas: una mirada diferente del misterio de Judas Iscariote


Tres versiones de Judas; cuento de Jorge Luis Borges, incluido en el libro Artificios, publicado en 1944.

Nils Runeberg, hondamente religioso, miembro de la Unión Evangélica Nacional, publicó en 1904 Kristus och Judas, y en 1909 Den hemlige Frälsaren, en los que se encuentra la clave que descifra un misterio que es central en la teología: la traición de Judas. “No una cosa, todas las cosas que la tradición atribuye a Judas Iscariote son falsas”. (De Quincey, 1857. Epígrafe de Kristus och Judas).
De Quincey teorizó que, para forzar a Jesucristo a declarar su divinidad y así encender una vasta rebelión en contra de Roma, Judas tuvo que entregarlo ante el Sanedrín.
“… el más precioso acontecimiento de la historia del mundo”. Esto no fue casual; es un hecho crucial en la redención de la humanidad. El papel de Judas, aunque un tanto superfluo en sí, porque se debe observar que, siendo Jesucristo “un maestro que diariamente practicaba en la sinagoga y que obraba milagros ante concursos de miles de hombres, no se requiere la traición de un apóstol”; a pesar de eso, el hecho está cargado de una elevación metafísica que tiene un lugar privilegiado en el misterio de la redención.
Nils Runeberg dilucida de la siguiente manera el enigma de Judas: “Judas, único entre los apóstoles, intuyó la secreta divinidad y el terrible propósito de Jesús. El Verbo se había rebajado a mortal; Judas, discípulo del Verbo, podía rebajarse a delator (el peor delito que la infamia soporta) y a ser huésped del fuego que no se apaga. El orden inferior es un espejo del orden superior; las formas de la tierra corresponden a las formas del cielo; las manchas de la piel son un mapa de las incorruptibles constelaciones; Judas refleja de algún modo a Jesús. De ahí los treinta dineros y el beso; de ahí la muerte voluntaria, para merecer aún más la Reprobación".
Dios se hizo hombre hasta la infamia, y para salvarnos eligió un ínfimo camino: a Judas.

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